CANCHAS DE GRAMA SINTÉTICA
La naciente proliferación de establecimientos deportivos de alquiler por horas conocidos como “canchas sintéticas”, es actualmente un tema de debate para los habitantes de la ciudad de Medellín.
La popularidad de estos lugares se ha dado por la iniciativa que ha tomado el sector privado tras probar el éxito comercial de estas canchas en países como Argentina, Brasil y España luego de que la idea surgiera del mundial de Estados Unidos 1994 en donde varios estadios de fútbol poseían este tipo de material. Hoy en día se puede decir que éstas son la evolución del fútbol tradicional que se juega en los grandes estadios alrededor del mundo, dando origen a una nueva práctica que es mucho más económica, ágil, rápida y dinámica debido a la innovadora grama sintética.
“El costo de 1 hora de juego puede estar entre los $60.000 y $100.000 pesos entre las distintas alternativas que existen en Medellín. El número de personas que juegan puede variar entre 5 y 11 jugadores según el tamaño de la cancha. Conseguir un turno para un mismo día en nuestras instalaciones es bastante difícil, razón por la cual hay que hacer las reservaciones previamente. Construir una buena instalación es costoso, sobretodo si se quiere ofrecer un ambiente en el que no solo se va a jugar fútbol sino también en el que se puede disfrutar de una zona de comidas, salones para eventos sociales y almacén de deportes”, comentó Héctor Agudelo Álvarez, director comercial de El Templo del Fútbol.
Frente a esto el Ingeniero Civil León Hugo Restrepo Gallego confirmó; “El montaje de estos inmuebles es muy costoso puesto que no solo hay que construir o modificar un área social sino que también hay que adecuar el terreno para la instalación de la grama. Primero se debe construir un buen sistema de drenaje. Después se debe rellenar el terreno con material granulado compactado. Luego se debe colocar una sub-base de arena nivelada. Seguidamente se debe hacer un vaciado macizo de cemento o concreto de un espesor de 8 a 10 centímetros. Finalmente se debe poner la grama sintética a la que se le agrega otra pequeña capa de arena para nivelar el compuesto”.
El mall comercial “La Catedral Del Fútbol” ha sido el último de estos establecimientos deportivos construidos hasta la fecha. “El proyecto surgió como respuesta a la creciente demanda de canchas sintéticas en Medellín. Las instalaciones deportivas que tiene la ciudad para este deporte son escasas y están bastante deterioradas. Las que restan son de clubes privados y de colegios que no las prestan o que cobran demasiado dinero por utilizarlas”, comentó Elkin Darío Giraldo, propietario del lugar.
“Los componentes de las gramas sintéticas garantizan una larga duración y contacto suave con una adherencia superior a la que ofrece cualquier otro campo de fútbol. También garantizan una mayor seguridad al deportista. Los únicos cuidados que hay que tener es mantener las áreas cubiertas con el material libre de hojas para que no le de hongos a la fibra y en caso de que esto suceda solo hay que aplicarle un herbicida que se puede comprar en cualquier tienda agropecuaria” explicó Elkin Darío.
En la actualidad existen muchas quejas y reclamos que provienen de vecinos que poseen negocios y que habitan en zonas residenciales debido a la modificación de los espacios y al ruido. La problemática se origina desde el momento en el que dichas edificaciones son entendidas como sitios recreativos según lo que se estipula en la oficina de Planeación. Hoy en día se debate su uso y finalidad, debido a su orientación mixta que está más cerca de lo que se conoce como establecimientos de esparcimiento público.
“Muchas de las solicitudes que se han entregado para este tipo de construcciones están en proceso de evaluación debido a que su funcionalidad no ha sido normalizada con respecto a la actividad que se desarrolla en ellas, en donde no está muy claro si éstas tienen como objetivo la recreación, el deporte o el comercio”, comentó Juan David Mesa, arquitecto e inspector de la Curaduría Tercera.
Actualmente el trabajo de Planeación y de las Curadurías es el de evaluar la viabilidad y el impacto de estos proyectos en donde la prioridad que se tiene es rectificar las futuras obras en concordancia a las leyes para así poder garantizar una armonía de los espacios urbanos para que el esparcimiento de estos inmuebles no sea desmesurado.
Según el arquitecto Mesa, estas canchas deben cumplir con las normas colombianas de diseño y construcción sismorresistente NSR-98, la Ley 400 de 1997, el Decreto Reglamentario 33 de 1998, el Decreto Nacional 564 de 2006 y con las reglamentaciones vigentes en el momento de la aprobación del proyecto. Todo ello varía de acuerdo a la ubicación en la que se encuentren teniendo en cuenta que existen espacios públicos y privados que se hallan en áreas de uso comercial, industrial y residencial. Muchos de los campos que hoy existen no cumplen con estas reglas y es por eso que el Gobierno está tratando de ser más estricto y crítico a la hora de aprobar un nuevo proyecto.
“Creo que estos nuevos espacios son muy positivos para la sociedad. Aquí viene gente de toda clase a hacer deporte y a pasar un rato agradable con sus amigos o en familia. El ambiente es muy sano y jamás he visto problemas. Sería una lástima que no se construyeran más de estas canchas debido a la falta de espacios en la ciudad. Creo que la alcaldía debería tomar muy en serio el tema del deporte y la recreación como salida a muchos de los problemas que hoy padecemos. Considero pertinente una intervención especial para que empresarios, Gobierno y demás actores implicados generen un espacio de diálogo en el que se puedan alcanzar acuerdos para que no se detengan dichos proyectos” así lo expresó Carlos Andrés Hernández, aficionado y visitante del Templo Del Fútbol.
Hoy en día para que se autorice alguna licencia de construcción es necesario cumplir con todas las normas y leyes existentes en donde el solicitante debe aportar todo lo relacionado con el proyecto arquitectónico y estructural. Conjuntamente el solicitante debe llenar toda la documentación requerida por Planeación. El tiempo de aprobación se debe dar en 45 días hábiles. Si existe algún inconveniente con el vecindario se dan otros 30 días hábiles para solucionar los problemas y hallar una conciliación. Si pasa este tiempo se da por desistida la solicitud.
En Medellín existen alrededor de 11 canchas (El Maracanazo, Cancha Parque Los Príncipes, Nueva Gente, El Monumental, San Ciro, Global Deportes, El Señor Gol, La Bombonera, El Templo Del Fútbol, La Catedral Del Fútbol y Wembley entre otras) situadas en Sabaneta, Envigado, Itagüí, El Poblado, Laureles, Belén y La Floresta. Se estima que otras tantas sean construidas si reciben la aprobación del Gobierno y el aval de comunidad para ser construidas.
La popularidad de estos lugares se ha dado por la iniciativa que ha tomado el sector privado tras probar el éxito comercial de estas canchas en países como Argentina, Brasil y España luego de que la idea surgiera del mundial de Estados Unidos 1994 en donde varios estadios de fútbol poseían este tipo de material. Hoy en día se puede decir que éstas son la evolución del fútbol tradicional que se juega en los grandes estadios alrededor del mundo, dando origen a una nueva práctica que es mucho más económica, ágil, rápida y dinámica debido a la innovadora grama sintética.
“El costo de 1 hora de juego puede estar entre los $60.000 y $100.000 pesos entre las distintas alternativas que existen en Medellín. El número de personas que juegan puede variar entre 5 y 11 jugadores según el tamaño de la cancha. Conseguir un turno para un mismo día en nuestras instalaciones es bastante difícil, razón por la cual hay que hacer las reservaciones previamente. Construir una buena instalación es costoso, sobretodo si se quiere ofrecer un ambiente en el que no solo se va a jugar fútbol sino también en el que se puede disfrutar de una zona de comidas, salones para eventos sociales y almacén de deportes”, comentó Héctor Agudelo Álvarez, director comercial de El Templo del Fútbol.
Frente a esto el Ingeniero Civil León Hugo Restrepo Gallego confirmó; “El montaje de estos inmuebles es muy costoso puesto que no solo hay que construir o modificar un área social sino que también hay que adecuar el terreno para la instalación de la grama. Primero se debe construir un buen sistema de drenaje. Después se debe rellenar el terreno con material granulado compactado. Luego se debe colocar una sub-base de arena nivelada. Seguidamente se debe hacer un vaciado macizo de cemento o concreto de un espesor de 8 a 10 centímetros. Finalmente se debe poner la grama sintética a la que se le agrega otra pequeña capa de arena para nivelar el compuesto”.
El mall comercial “La Catedral Del Fútbol” ha sido el último de estos establecimientos deportivos construidos hasta la fecha. “El proyecto surgió como respuesta a la creciente demanda de canchas sintéticas en Medellín. Las instalaciones deportivas que tiene la ciudad para este deporte son escasas y están bastante deterioradas. Las que restan son de clubes privados y de colegios que no las prestan o que cobran demasiado dinero por utilizarlas”, comentó Elkin Darío Giraldo, propietario del lugar.
“Los componentes de las gramas sintéticas garantizan una larga duración y contacto suave con una adherencia superior a la que ofrece cualquier otro campo de fútbol. También garantizan una mayor seguridad al deportista. Los únicos cuidados que hay que tener es mantener las áreas cubiertas con el material libre de hojas para que no le de hongos a la fibra y en caso de que esto suceda solo hay que aplicarle un herbicida que se puede comprar en cualquier tienda agropecuaria” explicó Elkin Darío.
En la actualidad existen muchas quejas y reclamos que provienen de vecinos que poseen negocios y que habitan en zonas residenciales debido a la modificación de los espacios y al ruido. La problemática se origina desde el momento en el que dichas edificaciones son entendidas como sitios recreativos según lo que se estipula en la oficina de Planeación. Hoy en día se debate su uso y finalidad, debido a su orientación mixta que está más cerca de lo que se conoce como establecimientos de esparcimiento público.
“Muchas de las solicitudes que se han entregado para este tipo de construcciones están en proceso de evaluación debido a que su funcionalidad no ha sido normalizada con respecto a la actividad que se desarrolla en ellas, en donde no está muy claro si éstas tienen como objetivo la recreación, el deporte o el comercio”, comentó Juan David Mesa, arquitecto e inspector de la Curaduría Tercera.
Actualmente el trabajo de Planeación y de las Curadurías es el de evaluar la viabilidad y el impacto de estos proyectos en donde la prioridad que se tiene es rectificar las futuras obras en concordancia a las leyes para así poder garantizar una armonía de los espacios urbanos para que el esparcimiento de estos inmuebles no sea desmesurado.
Según el arquitecto Mesa, estas canchas deben cumplir con las normas colombianas de diseño y construcción sismorresistente NSR-98, la Ley 400 de 1997, el Decreto Reglamentario 33 de 1998, el Decreto Nacional 564 de 2006 y con las reglamentaciones vigentes en el momento de la aprobación del proyecto. Todo ello varía de acuerdo a la ubicación en la que se encuentren teniendo en cuenta que existen espacios públicos y privados que se hallan en áreas de uso comercial, industrial y residencial. Muchos de los campos que hoy existen no cumplen con estas reglas y es por eso que el Gobierno está tratando de ser más estricto y crítico a la hora de aprobar un nuevo proyecto.
“Creo que estos nuevos espacios son muy positivos para la sociedad. Aquí viene gente de toda clase a hacer deporte y a pasar un rato agradable con sus amigos o en familia. El ambiente es muy sano y jamás he visto problemas. Sería una lástima que no se construyeran más de estas canchas debido a la falta de espacios en la ciudad. Creo que la alcaldía debería tomar muy en serio el tema del deporte y la recreación como salida a muchos de los problemas que hoy padecemos. Considero pertinente una intervención especial para que empresarios, Gobierno y demás actores implicados generen un espacio de diálogo en el que se puedan alcanzar acuerdos para que no se detengan dichos proyectos” así lo expresó Carlos Andrés Hernández, aficionado y visitante del Templo Del Fútbol.
Hoy en día para que se autorice alguna licencia de construcción es necesario cumplir con todas las normas y leyes existentes en donde el solicitante debe aportar todo lo relacionado con el proyecto arquitectónico y estructural. Conjuntamente el solicitante debe llenar toda la documentación requerida por Planeación. El tiempo de aprobación se debe dar en 45 días hábiles. Si existe algún inconveniente con el vecindario se dan otros 30 días hábiles para solucionar los problemas y hallar una conciliación. Si pasa este tiempo se da por desistida la solicitud.
En Medellín existen alrededor de 11 canchas (El Maracanazo, Cancha Parque Los Príncipes, Nueva Gente, El Monumental, San Ciro, Global Deportes, El Señor Gol, La Bombonera, El Templo Del Fútbol, La Catedral Del Fútbol y Wembley entre otras) situadas en Sabaneta, Envigado, Itagüí, El Poblado, Laureles, Belén y La Floresta. Se estima que otras tantas sean construidas si reciben la aprobación del Gobierno y el aval de comunidad para ser construidas.
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